LA DANZA DE LOS DIABLOS
El Deán Don Antonio de Saavedra y Leiva encontró en el Huanchaco antiguo, una danza popular que utilizaba una vistosa vestimenta parecida a la de los personajes de la baraja española.Recogió sus expresiones de baile y música y diseñó su nueva indumentaria de Satanás ó Diablo que se conserva hasta hoy.Así apareció éste conjunto folklórico en el año 1681 para representar un pasaje de la Biblia: En el cielo los ángeles se dividieron en dos grupos; los buenos y fieles a Dios con su jefe el Arcángel San Miguel; y los malos ó rebeldes con Lucifer ó Satanás.El Deán estableció que dicha danza sólo debía aparecer cada cinco años, para bailarle a la Virgen Viajera pero frente a la imagen del Arcángel San Miguel que preside la Bajada Quinquenal. Posteriormente decayó mucho y fue Don Filomeno Arzola Lavalle que la revivió con más expresiones de golpe de danzas y aires musicales al son de la concertina y las quijadas de burro. Esta danza es única en el Perú por su estilo y movimientos musicales.
El Cerrito de la Virgen
El Deán Don Antonio de Saavedra y Leiva encontró en el Huanchaco antiguo, una danza popular que utilizaba una vistosa vestimenta parecida a la de los personajes de la baraja española.Recogió sus expresiones de baile y música y diseñó su nueva indumentaria de Satanás ó Diablo que se conserva hasta hoy.Así apareció éste conjunto folklórico en el año 1681 para representar un pasaje de la Biblia: En el cielo los ángeles se dividieron en dos grupos; los buenos y fieles a Dios con su jefe el Arcángel San Miguel; y los malos ó rebeldes con Lucifer ó Satanás.El Deán estableció que dicha danza sólo debía aparecer cada cinco años, para bailarle a la Virgen Viajera pero frente a la imagen del Arcángel San Miguel que preside la Bajada Quinquenal. Posteriormente decayó mucho y fue Don Filomeno Arzola Lavalle que la revivió con más expresiones de golpe de danzas y aires musicales al son de la concertina y las quijadas de burro. Esta danza es única en el Perú por su estilo y movimientos musicales.
El Cerrito de la Virgen
La antigua historia religiosa de Huanchaco también vive unida al Cerrito que lleva por nombre de “La Virgen”.Dice la tradición que la Virgen del Socorro permaneció algún tiempo recibiendo culto de las pescadores catequizados en la pequeña ermita de la playa construida por los Franciscanos en 1537, pero misteriosamente desaparecía.La buscaban por todos los parajes cercanos, encontrándola en la cueva de la cumbre del Cerrito, situada en lo alto del pueblo ; la regresan entre oraciones y cánticos; más en pocos días de olvido, nuevamente corre la noticia de su desaparición.Los antiguos huanchaqueros van presurosos al Cerrito donde contemplan sonriente y tierna a su Virgen.Con el cariño y amor de hijos, uno de ellos, la toma en sus brazos, encaminándose hasta colocarla en su ermita.Una vez más, desaparece y los antiguos pescadores, apenados pero llenos de esperanza ,se dirigen al Cerrito y cual no sería su sorpresa al contemplar la bendita imagen rodeada de una luz extraordinaria ; asentada sobre nubes y la cueva, luminosa.Postrados de rodillas rezan, encienden fogatas y luminarias.Los Franciscanos comprenden que la Virgen pedía su Iglesia en la parte alta del Puerto.Como el Cerrito tenía lejanía al mar, los antiguos pescadores derriban el ídolo ¨El Pez de Oro¨ que aún existía en la Huaca ó templete pre-hispánico, cuyo sitio ocupa actualmente la Iglesia Parroquial y en ella acuerdan colocar la imagen.Regresa la multitud jubilosa; ascienden al Cerrito hasta la Cueva; y allí por primera vez uno de los religiosos franciscanos celebra la Santa Misa, trasladando después la imagen entre místicas oraciones a la Huaca que con el transcurrir de los años se convirtió en monumental Iglesia colonial.Los religiosos y los antiguos pescadores no olvidaron éstas apariciones.Cada año en Romería se llegaba al Cerrito a celebrar la Santa Misa; tradición que el mismo Deán Saavedra la continuó hasta su muerte.La imagen de la Virgen del Socorro permanece en la altura de la caleta y su Templo sirve como guía y auxilio de los navegantes y pescadores.
( Fuente: Rvdo. Rufino Benítez Vargas)
El coro de ¨Las Pallas¨
Otro conjunto vernacular antiquísimo que junto a la Danza de los Diablos aún se conserva; apareciendo cada cinco años.Cuenta la Historia que el Deán Saavedra después de crear la danza de Los diablos quiso formar una Corte de Vírgenes que acompañaran vestidas de inocencia a Nuestra Señora del Socorro en su viaje quinquenal a Trujillo, para lo que reunió a los Huanchaqueros en el santuario, invitándoles a consagrar sus hijas a la ¨Mamita del Socorro¨,cariñoso apelativo con el cual también se le conoce ,para que en grupo o en Coro la acompañen y le canten durante la Romería. Esta entrega significaría mucha generosidad con la Virgen, recibiendo de ella bendiciones celestiales.Los pescadores presurosos y sin mirar las exigencias de su presentación, llevaron a sus niñas de 10 a 18 años al Santuario vestidas de blanco, con corona y cera encendida y con un listón azul a manera de cinturón ó banda. Esto sucedía en el año de 1681.En la Misa de Consagración celebrada por el mismo Deán Saavedra, pusieron a los pies de la Virgen a sus hijas inocentes y puras, con la promesa seria de seguirla día y noche, cantando versos ,limpiando el polvo del camino y guardando su bendita imagen.Las fervorosas madres huanchaqueras ofrecieron además que mientras dure la promesa, sus hijas vivirían del cariño de la Virgen del Socorro y no del mundo mundano.No podían tener flirteos ,ni verse con el novio o el pretendiente y si alguna de ellas quebrantaba este voto por su debilidad, recibiría el castigo de la Virgen y sus padres tenían que retirarla de la casa por mentirosa.Una vez entregadas a la Virgen, las madres se encargaban de cuidar a las hijas consagradas, guardando su inocencia y pureza, porque consideraban que una joven huanchaquera no siendo pura e inocente jamás podría ser “Palla” de la Virgen.Promesa tan dura y obligatoria, asumida con tanta responsabilidad.Después de un mes, el 24 de Diciembre cuando ya Nuestra Señora del Socorro regresaba de Trujillo a su Santuario, terminaba solemnemente. Allí las “Pallas” con acento de despedida cantábanle:
“Virgencita del Socorro
Hoy y siempre te daré
toda mi vida señora
y jamás te olvidaré".
Retrocediendo en un compás triste, salían del santuario y libres de éste compromiso después de año nuevo, se reiniciaba el noviazgo para casarse como Dios manda.
Retrocediendo en un compás triste, salían del santuario y libres de éste compromiso después de año nuevo, se reiniciaba el noviazgo para casarse como Dios manda.
La Leyenda del Cerro de la Campana
Contaba mi abuelo que unos pescadores hallaron una campana de una belleza impresionante; toda de oro, que llevaba una inscripción que rezaba : ¨Para la Iglesia de Huanchaco¨, a la orilla de la playa y la llevaron a la Iglesia, desde donde refulgía con el sol y se escuchaba su tañido sin par.La Nobleza de Trujillo, envidiosa de que una pobre caleta de pescadores ostentara una campana de tal magnitud, decidieron llevarla con el fin de que resaltara aún más la grandeza de su Catedral. Pero, ella volvió al campanario de la Iglesia, supuestamente traída por los pescadores huanchaqueros.Iracundos, los trujillanos regresaron hasta la Caleta, cargándola con dirección a la Ciudad; pero nuevamente regresó sola, a pesar que la custodiaron día y noche.Entre asustados y preocupados volvieron una vez más a la humilde caleta, cargando la campana sobre una pequeña carreta tirada por bueyes y atada con cadenas.Pero, cuál no sería la sorpresa de la terca nobleza, ! En el camino se había desatado sola y no quería regresar! , sino que seguía en raudo vuelo hasta un cerro cercano, que con el tiempo llegaría a conocerse con el nombre de Cerro de la Campana.Según dicen, allí, en la parte más alta del Cerro, ascendió, hundiendo una parte de la cumbre en donde quedó enterrada para siempre.Los pobladores del lugar afirman que a esta campana se le oye tocar cada cinco años, para la Festividad Quinquenal de la Virgen del Socorro; y que para Semana Santa se ve refulgir oro y plata en las faldas del mencionado cerro.
Fotos: Archivo Casa de la Cultura y Turismo del Distrito de Huanchaco
k aburrido
ResponderEliminarAmig@ deberias aprender a respeter las costumbres de los demas pueblos
EliminarLa Historia, la Tradiciòn, las leyendas, cuentos, usos y costumbres de nuestros pueblos son la base de su sociedad y merecen no solo conservarse y valorarse sino tambièn respetarse.
ResponderEliminarGracias Percy por traer al presente una leyenda tan linda como la del Cerro Campana. Esa leyenda me la contaba mi abuela Ofelia Javes Huamanchumo, hace muchos años y queriendo rememorarla para escribir un poema la encontré en tu blog. Gracias otra vez! Nancy W. De Honores
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